TEXTO. II CORINTIOS.1:3-4.
INTRODUCCIÓN:
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La palabra consolación- Significar llamar al lado de uno, la palabra castellana consolar proviene del término latino consolare. El término confortar sería más ajustado.
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Él apóstol Pablo nos anima aquí para buscar el consuelo de Dios, quien es el Padre de toda consolación. II Cor.1:3.
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Nosotros debemos de consolarnos los unos a los otros, por que si un hermano se duele, nosotros debemos de dolernos con él. I Cor.12:26. Todos debemos de sentir lo mismo. Rom.12:16. Debemos de gozarnos con los que se gozan, y llorar con los que lloran. Rom.12:15. Por eso debemos de consolarnos los unos a los otros.
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DIOS ES EL PADRE DE TODA CONSOLACIÓN. II CORINTIOS.1:3.
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Él apóstol Pablo da gracias a Dios. II Cor.1:2. Y le bendice.3. Osea hablar bien de Dios nuestro Padre por su misericordia, y por ser él Padre de toda consolación. Rom.15:5. Ya que Dios es el consolador eterno. II Tes.2:16. Y consuela nuestros corazones. V.17.
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Dios nos consuela.86:17; Isaías.49:13. Dios consuela a su pueblo en la aflicción. Isaías.52:9.
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Dios consuela a todos los que lloran. Isaías.61:2.
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Dios consuela como consuela una madre a su hijo. Isaías.66:13. Sí la madre esta pendiente de su hijo cuando este esta en algún problema, imaginece como esta Dios con nosotros.
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Dios nos consuela de nuestras tristezas.31:13. Ya que él consuela a los deprimidos. II Cor.7:6.
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Dios esta pendiente de todos nosotros para ayudarnos y consolarnos en toda nuestras aflicciones y tribulaciones que pasamos en esta vida como cristianos.
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No despreciemos esta consolación que Dios nos da, dia a dia.
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NOSOTROS DEBEMOS DE CONSOLAR A OTROS. II CORINTIOS.1:4.
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Dios nos consuela en todas nuestras aflicciones, pero para un propósito y el propósito es que nosotros consolemos a aquellos que estan en aflicciones, debemos de consolar a otros con el mismo consuelo que Dios nos consuela. II Cor.1:4.
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Tenemos un mandamiento que cumplir es algo reciproco, Dios nos consuela para que nosotros consolemos a otros. Es una cadena sin fin.
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Es necesario haber experimentado la consolación de Dios antes que podamos impartirla a otros.
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Hay muchas maneras de consolar a otras personas.
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Las cartas son una buena manera de consolar a otros.15:31. Como aquella que salió de Jerusalén, para los gentiles.
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Las escrituras nos dan consuelo.15:4.
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Por alguna visita.37:35. Como los hijos de Jacob que quisieron consolarlo. Al igual los amigos de Job. Job.2:11.
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Como los Judios que habían venido a consolar a Marta y María, por la muerte de su hermano Lázaro. Juan.11:19.
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Cuando miramos a otros hermanos que no hemos vistos esto nos consuela.16:40. I Tes.3:7.
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Como hemos visto hay muchas manera para consolar a otras personas, debemos de consolarlas en sus aflicciones. Muchas veces algún hermano esta enfermo o tiene a un familiar enfermo y no vamos para consolarle, o cuando se le muere un ser querido, debemos de consolarla estando con ellos en esos momentos difíciles de su vida.
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No olvidemos que la palabra consolar es estar al lado, debemos de estar al lado del que esta sufriendo.
CONCLUSIÓN:
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Dios es el Padre de toda consolación y él nos consuela, para que nosotros consolemos a los que estan a nuestro alrededor.
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Hay muchas maneras para consolar a la persona que esta en aflicción, y nosotros debemos de consolarla.
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No seamos egoístas al no consolar a las personas que estan en aflicciones.
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Seamos fieles en cumplir con este mandamiento de consolarnos los unos a los otros. Debemos de ser de un mismo sentir.
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